La competencia febril por ofrecer productos más baratos, pone en peligro la sostenibilidad económica de los pequeños productores que no pueden competir con los grandes productores.
Vender los productos por debajo de de los precios de coste genera pobreza.
Los productos de comercio justo o con certificaciones de sostenibilidad aseguran precios justos de los productos que aseguren a los productores y trabajadores salarios justo y acceso a bienes básicos como educación y sanidad.